¿Para qué sirven?
Estos equipos permiten la reducción drástica del arrastre de tierra y polvo en sus instalaciones y vías públicas, lo que disminuye costos de limpieza vial, mejora la seguridad (menos accidentes por calles resbaladizas) y prolonga la vida útil de flotas y maquinaria al eliminar suciedad adherida antes de su operación. Su sistema integrado de recuperación y tratamiento de agua permite reutilizar hasta el 100 % del agua de lavado, minimizando el consumo del recurso, reduciendo costos operativos y brindando garantía de cumplimiento de normativas en la descarga de aguas residuales.